De la misma manera que es muy importante proteger bien nuestra piel de los rayos del sol usando para ello una protección adecuada, entre otras cosas, lo es cuidarla con esmero tras la exposición solar.
Beneficios y riesgos de tomar el sol
Tomar el sol, como todo en esta vida, con moderación y cuidado, es bueno. Nos recarga de energía y nos aporta la vitamina D, incluso puede ser beneficiosas para algunas afecciones cutáneas como el acné, la dermatitis o la psoriasis, siempre que nos expongamos al sol fuera de las horas centrales del día y como decíamos, con la protección solar adecuada.
Sabíais que ese bronceado que tanto nos gusta no es mas que una defensa de la piel en respuesta al daño que le produce el sol. Seguramente os lo pensaréis dos veces antes de volver a pasar horas y horas tomándolo.
Por ello es muy importante proteger nuestra piel, no solo ya cuando vayamos a exponernos al sol, si no una vez lo hayamos tomado. La hidratación de nuestra piel es por tanto un elemento fundamental para mantenerla joven y sana.
El sol y la falta de agua son los principales enemigos de la deshidratación. En el verano solemos abusar de nuestra piel en busca del bronceado perfecto.
Beber agua y tomar alimentos ricos en vitamina C y E y realizar algo de ejercicio físico, son algunas de las opciones válidas para hidratar y tonificar nuestra piel. Pero aunque bebamos mucho agua la piel no suele recibir el aporte necesario para compensar el exceso de radiación solar. Es allí cuando más necesario se hace el uso de un buen producto hidratante para después del sol.
¿Cómo cuidar la piel este verano?
Apuesta por productos que ayuden a prevenir los efectos del sol así como por productos que ayuden a calmar, reparar y mantener la piel diariamente.
Hoy en día existen muchos productos para después de la exposición solar que aportan a nuestra piel la hidratación que necesita en esos momentos.
Además, algunos de ellos te ayuda no solo a cuidar tu piel sino a prolongar el bronceado de forma natural.